Fislem proyecta extender su red de pisos tutelados para atender a enfermos mentales Una nueva vivienda supervisada en la capital para comienzos de 2009 y otra en Puertollano, posteriormente, vendrían a aliviar la demanda que hay de este tipo de recursos en la provincia La Fundación Sociosanitaria para la Integración Sociolaboral del Enfermo Mental (Fislem) proyecta extender su red de pisos tutelados en la región. En la provincia de Ciudad Real, donde ya existen cinco viviendas de este tipo, esta ampliación se vería materializada con la apertura de una nueva a principios del próximo año y otra posteriormente en Puertollano. «Nuestra intención es encontrar en estos meses de 2008 un piso para tenerlo acondicionado de cara al inicio del próximo año», adelantó a LaTribuna el director de Fislem, José Antonio Contreras. No en vano, la fundación ya cuenta con la ayuda de la Obra Social La Caixa para sufragar los gastos. «Hemos firmado un convenio de colaboración económica por el que la entidad bancaria financiará con 75.000 euros tres viviendas supervisadas para enfermos mentales: una en Valdepeñas, que ya se ha puesto en marcha y que en breve será inagurada; otra en la localidad toledana de Consuegra y, finalmente, la que pondremos en funcionamiento en Ciudad Real», precisó Contreras. En la capital ciudadrealeña ya existe uno de estos pisos tutelados, en este caso de baja supervisión, que hasta el pasado 31 de agosto de 2008 había prestado asistencia a un total de seis usuarios, uno más que en el mismo periodo del año pasado. En conjunto, en lo que va de año se ha atendido a 36 personas en las cinco viviendas de las que dispone Fislem en la provincia, cinco más que los contabilizadas al término de 2007. Y es que el piso de Valdepeñas, con un total de seis plazas, ha supuesto un alivio en la atención a enfermos mentales en Ciudad Real. En este sentido, Fislem entiende que todas sus vacantes para viviendas tuteladas están cubiertas, que hay una «pequeña lista de espera» y que se revela imprescindible elaborar una bolsa regional en aras de «conocer la demanda exacta de este tipo de recursos asistenciales», tal y como indicó José Antonio Contreras. «Hace tiempo se hizo un estudio para ver las necesidades que había en base a poblaciones y observamos que en Toledo y Ciudad Real había una escasez importante». Así mismo, en el Plan de Salud Mental 2005-2010 está contemplada la construcción de una residencia en la zona de La Mancha-Centro ya que, como aseveró el director de Fislem, «hay enfermos mentales que se encuentran al cuidado de personas mayores». Mientras que las viviendas supervisadas, que garantizan una atención individualizada y favorece la convivencia en un entorno social normalizado, son dispositivos diseñados para usuarios que han alcanzado un grado aceptable de autonomía; las residencias comunitarias son recursos con una supervisión estable las 24 horas para enfermos mentales con un mayor grado de deterioro. Textos tomados de Diario La Tribuna
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